Este mediodía se ha procedido a la reapertura para vehículos del último tramo de Antonio Maura aunque todavía no se han dado por concluidas las obras
¡Por Tutatis, por Belenos y por el árbol de Júpiter”. Así cuasiparafraseando a los personajes de Asterix podrían haberse manifestado, llenos de admiración, los conductores que esta mañana se han encontrado, después de casi un mes de obras, expedito el acceso y la salida del centro de la capital por las calles Eduardo Dato (abierta el pasado viernes) y el último tramo de Antonio Maura, reabierto hoy.
Con la apertura de esta última calle se da por concluida toda la obra de elevación de las calles adyacentes a la Plaza de León. ¿Toda? No. Porque en la mitad del tramo afectado de la calle Antonio Maura no se ha podido completar el pulido del asfalto fundido extendido y que debería haber sido la culminación del proyecto.
No se ha hecho, porque como explican desde la Concejalía de Obras, no estaban disponibles las máquinas que durante prácticamente toda la semana pasada han estado puliendo y lijando el asfalto de las calles Eduardo Dato, Padre Higinio Aparicio y Antonio Maura, hasta donde han llegado. Se trata de una empresa subcontratada por la adjudicataria del proyecto, Hormigones Sierra, que tenía un mes para la ejecución del mismo y que ha consumido apenas 20 días.
De ahí que en unos días, tenga de volver a cortarse al tráfico esta calle de salida desde el Centro de la capital hacia la plaza de León y Correos. Pero en ese caso será solo durante una jornada. En el tiempo en el que se retira la capa superficial y brillante del asfalto fundido para dejar a la vista los áridos que componen la mezcla.
Esta reapertura ha permitido, igualmente, que a lo largo de la mañana de hoy, las líneas de autobuses 1, 3 y 4 recuperaran sus trazado habitual por Antonio Maura.
Árboles de Júpiter.
Lo que sí se ha dado por concluido es la plantación de los árboles que pondrán un punto de intenso color durante su floración en esta zona de la ciudad, dado que sus flores son de un fucsia intenso y que muestran todo su esplendor entre los meses de junio y agosto.
Se trata de una especie que se ha utilizado ya en varias de las últimas obras de renaturalización y reurbanización de calles del centro de la ciudad, como por ejemplo en la Calle Mayor Antigua o en la plaza de San Antolín, junto a la Catedral.
“Estéticamente tiene valor todo el año, en primavera el color rojizo de sus hojas al brotar, el verde de la primavera, la floración del verano, el rojizo de nuevo en otoño y en invierno y el resto del año, el tono y la coloración de su tronco”, explica el CSIF en su tomo
Los árboles de Júpiter además de colorido también aportará a la zona sombra, puesto que pueden llegar a terne seis metros de altura, y una proyección de copa de 5 a 6 metros de diámetro.
En total se han plantado ocho ejemplares de árboles de Júpiter en estas tres calles. Tres en Eduardo Dato, tres en Antonio Maura y dos en Padre Higinio Aparicio. Se ha hecho en alcorques abiertos en el terreno y que, a diferencia de los implantados en el tramo inicial de la calle Mayor Antigua no se han sobreelevado, y están al mismo nivel que el resto de la calle, donde aceras y a nueva calzada suponen una misma plataforma.
En la ejecución de estas obras se han invertido 146.534,99 euros, procedentes de las Ayudas Next Generation vinculadas a la creación de una Zona de Bajas Emisiones en el centro de Palencia.
