El Colina Clinic Palencia Rugby Club se ha clasificado para jugar los Play Off. El jugador palentino destaca la importancia de no perder la mentalidad competitiva hasta el disputar el primer partido de ida de la eliminatoria
Este año el equipo ha jugado una liga de ensueño. Con solo una derrota. Llegados a este punto, en el que habéis quedado los segundos en la tabla ¿qué balance haces de todas estas jornadas?
El equipo sabía que este era un año de reconstrucción tras una temporada en la Segunda División Nacional. Y desde el principio nos propusimos no bajar el buen ritmo competitivo de los últimos años. El grupo, encabezado por nuestro entrenador Tinín, respondió y ello se ha visto reflejado en los resultados.
Jugáis ahora en febrero el partido de ida de Play Off. ¿Cómo os planteáis esta recta final de la temporada en cuanto a entrenos y preparación?
Hay un parón muy notable de varias semanas por lo que somos conscientes que es muy importante no perder la mentalidad competitiva y continuar entrenando como si jugásemos cada semana.
Hay muchos aspectos de nuestro juego que debemos mejorar si queremos poder competir por el título de liga.
La realidad es que llegados al Play Off cualquiera de los cuatro finalistas es candidato a ganar el campeonato, y el trabajo de estas semanas será determinante.
Las posibilidades de conseguir el ascenso son muy reales… ¿Qué ánimos hay entre los jugadores y cuerpo técnico?
Nuestro objetivo este año es el de competir al máximo nivel y continuar aportando al crecimiento de nuestro club. El ascenso es un premio al trabajo de muchos años y sabemos que si realizamos un buen trabajo volveremos a competir a nivel nacional.
Además de jugador también eres entrenador. Tu vida por lo que se ve está muy ligada al rugby en todas sus facetas…
Sí, desde muy pequeño ha sido uno de los pilares principales de vida, empezando por mi familia, tanto mi padre, como madre, como mi padrino, fueron jugadores, por lo que es algo que desde que tengo uso de razón ha estado presente.
También conocido a muchas de las personas más importantes en mi vida gracias a este deporte y a este club. Es una suerte y un privilegio por el que siempre voy a estar agradecido.
¿Qué dirías que te aporta el ser jugador y el ser entrenador?
Ser jugador me aporta el poder disfrutar del mejor deporte del mundo (en mi opinión), junto (y en alguna ocasión en contra) a mis mejores amigos, y pudiendo defender y llevar con orgullo el nombre de mi provincia y de mi ciudad.
Y ser entrenador me ha dado la oportunidad de devolver un poco todo lo que me ha aportado este deporte. Los niños y niñas que conforman la cantera de este club son uno de los principales motivos que nos ha dado a conocer a nivel nacional, compitiendo con las principales escuelas de rugby español. Pero también me entristece ver (y haber sufrido como jugador), cómo a medida que se acercan a las categorías senior no cuentan con los medios e instalaciones para continuar su desarrollo deportivo. Sin un campo real en el que entrenar y unas instalaciones propias donde poder realizar la preparación deportiva y física requerida, las opciones para continuar su desarrollo se limitan drásticamente.
Esta pasividad institucional por cumplir aquello que debería estar realizado hace tiempo pone en riesgo la retención y el desarrollo del talento dentro de nuestra provincia.
Eres una persona muy querida en el club. ¿El éxito del conjunto radica en la buena sintonía que hay entre todas las partes?
Por suerte contamos con una masa social compuesta por patrocinadores y aficionados excelente. Y en mi opinión, gran parte del éxito radica en el incansable trabajo y apoyo de estas personas que no se ponen las botas de tacos (aunque algunas también se las ponen). El Club es más que los jugadores y las competiciones deportivas, y sabemos que el crecimiento y los logros alcanzados en los últimos años es fruto del trabajo de todos.