Entrevista con el vicerrector de Infraestructuras, Patrimonio y Sostenibilidad de la UVa
El Campus de Palencia, y más concretamente la ETS de Ingenierías Agrarias, es un referente en áreas vinculadas con el cambio climático, como es la gestión forestal sostenible. Era natural, por tanto, que sus infraestructuras dispusieran de un sistema de calefacción igualmente respetuoso con el medio ambiente.
En abril de 2021 se iniciaban las obras de instalación de la nueva red de calor con biomasa forestal, con una longitud total de 1,2 kilómetros y una inversión de 1,3 millones de euros. Unas obras que han hecho posible eliminar las calderas de gasóleo y gas y, con ello, la emisión anual de 589 toneladas de CO2. Este sistema de calefacción se nutre de astilla forestal, con una caldera de tecnología de parrilla móvil y un electrofiltro que reduce al mínimo las emisiones as la atmósfera. Su potencia instalada corresponde a 1.650 KW térmicos.
La apuesta por un sistema de energía forestal contribuye además a la generación de empleo en entornos rurales, a reducir la dependencia energética de la región y a la prevención de incendios forestales, gracias a la gestión de bosques resultante de la obtención del combustible.
El vicerrector de Infraestructuras, Patrimonio y Sostenibilidad de la Universidad de Valladolid, Julio Grijalba, nos habla de las primeras semanas de funcionamiento y los objetivos de reducción de emisiones de carbono para el Campus de Palencia y el conjunto de la UVa.
Este mes de octubre ha entrado en funcionamiento la nueva red de calor con biomasa en el Campus palentino. Se calcula que la UVa ahorrará más del 35 % frente a los costes habituales de combustibles fósiles, que además están en plena escalada. ¿Notan ya los primeros resultados?
Aún es pronto, acabamos de empezar con la temporada de calefacción, que este año se ha aplazado ligeramente gracias a que la llegada de las temperaturas bajas se ha retrasado. En su momento, 2019 y 2020, estimábamos que el ahorro económico sería de alrededor del 15 % asociado a la reducción de consumo por mejora de las instalaciones generadoras, teniendo en cuenta que se incluye la amortización de la red y todos sus equipos e instalaciones.
La sala de calderas de la ETSIIAA estaba en unas condiciones obsoletas que apenas permitían dar servicio y había que acometer su renovación. Además, en este ahorro no se tienen en cuenta los costes de mantenimiento, que están incluidos en la tarifa de suministro de la red. Con los precios actuales del gas (cuatro veces superiores a los de aquel entonces), este 15% puede aumentar en la misma proporción (más del 35%, que indica en su pregunta).
El combustible empleado es astilla forestal G-100 y uno de los objetivos paralelos de este proyecto es contribuir a la generación de empleo en entornos rurales. ¿De qué territorios se obtienen? ¿Se buscan proveedores de proximidad?
La explotación y mantenimiento de la red es llevada a cabo por la empresa pública Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León (SOMACYL), quien además gestiona gran parte de los recursos energéticos renovables de nuestra región relacionados con la biomasa, tanto a nivel forestal como de plantaciones con finalidades energéticas. En resumen, la biomasa procede por completo de Castilla y León (confirmado con SOMACYL).
La instalación de calderas de biomasa forestal para los diversos edificios de la Universidad de Valladolid comenzó en 2015. ¿Están dando buen resultado en aquellos lugares donde llevan más tiempo en funcionamiento?
Estamos completamente satisfechos con la apuesta que se hizo por la biomasa en aquel entonces. Además de una apuesta por mejorar el comportamiento ambiental y descarbonizar nuestra Universidad, en la actualidad nos está resultando una alternativa mucho más ventajosa económicamente, que nos permite disponer de estabilidad en los costes energéticos.
« La UVa es una de las instituciones que mejor posicionamiento tiene, incluso a nivel nacional, para conseguir alcanzar una universidad climáticamente neutra»
¿Es factible (y recomendable) la instalación de este tipo de sistemas de calor en domicilios particulares o comunidades?
Por supuesto que es factible, y muy recomendable para ciertas instalaciones como puedan ser las redes de calor.
Desde la ETS de Ingenierías Agrarias, y especialmente desde el Instituto de Gestión Forestal Sostenible, se buscan soluciones que pongan en común la sostenibilidad con el desarrollo de las poblaciones rurales, a través de la gestión sostenible de sus recursos naturales. ¿La UVa está alineada con ese objetivo? ¿Qué otras acciones se proponen en esta línea?
La Universidad lleva años trabajando en mejorar su comportamiento energético y ambiental. La apuesta por la biomasa como recurso energético para los sistemas de calefacción y ACS en la mayoría de sus instalaciones, la construcción de edificios sostenibles y eficientes, las rehabilitaciones energéticas y las actuaciones continuadas de mejora de la eficiencia energética, han conseguido reducir las emisiones de miles de toneladas de CO2 a la atmósfera cada año, mejorando las condiciones en los espacios universitarios y manteniendo estable el consumo de energía.
También se trabaja de forma continuada por reducir la huella de carbono de nuestra universidad fomentando modos de transporte sostenibles dentro de la comunidad universitaria, incorporando criterios ambientales en la adquisición de bienes y servicios y apoyando iniciativas que permitan mejorar el comportamiento ambiental de nuestra institución.
¿Cómo de cerca están las infraestructuras del Campus de Palencia, y del conjunto de la Universidad de Valladolid, de alcanzar la huella de carbono cero?
A nivel de emisiones directas, las llevadas a cabo en nuestras instalaciones, casi el 90% de las instalaciones de producción de calefacción y ACS universitarias emplean combustibles de emisiones nulas (biomasa fundamentalmente).
En cuanto a la electricidad, en los procedimientos de compra de electricidad por parte de la UVa se exige la garantía de que el origen de la electricidad sea 100% renovable y se está trabajando en ampliar la electricidad generada in situ a través de tecnologías renovables como la fotovoltaica. Teniendo en cuenta esto, podemos afirmar que la UVa es una de las instituciones que mejor posicionamiento tiene, incluso a nivel nacional, para conseguir alcanzar una universidad climáticamente neutra.