La compañía ha registrado en el primer semestre del año una mejora significativa en la rentabilidad y una fuerte generación de ‘free cash-flow’
Renault Group ha revisado al alza sus perspectivas financieras para 2022, con un margen operacional del Grupo superior al 5 por ciento frente alrededor del 3 por ciento previsto anteriormente, y un ‘free cash-flow operacional del Automóvil de más de 1.500 millones de euros frente a un resultado positivo previamente. La compañía, además, mejora su margen operacional del Grupo de 988 millones de euros (4,7 por ciento de la cifra de negocios, que supone una mejora de 556 millones de euros y 2,6 puntos en comparación con el primer semestre de 2021) y el margen operacional del Automóvil de 420 millones de euros (2,1 por ciento de la cifra de negocios del Automóvil, con una mejora de 565 millones de euros (+2,8 puntos) a pesar de un descenso de 136.000 vehículos con respecto a un año antes).
“Renault Group persigue con determinación su profunda transformación y la recuperación de sus actividades. Los resultados del 1er semestre de 2022 son prueba de ello: a pesar de todos los obstáculos relacionados con el cese de la actividad en Rusia, la crisis de los semiconductores y la inflación de costes, el Grupo sigue mejorando su rendimiento operacional y empieza a beneficiarse del éxito de los nuevos lanzamientos”, señala el director general de Renault Group, Luca de Meo, en un comunicado recogido por Ical.
En él, el directivo apunta que “habiendo compensado en gran medida la pérdida de actividades rusas y continuando su transformación a gran velocidad, Renault Group revisa al alza sus perspectivas financieras para 2022. En otoño, se presentarán nuevos objetivos financieros a medio plazo, así como el despliegue acelerado de Renaulution durante un Capital Market Day. Todas nuestras energías se movilizan para transformar Renault Group en un actor competitivo, tecnológico y responsable”.
Resultados estables.
En cuanto a los resultados del primer semestre del año, la cifra de negocios del Grupo fue de 21.100 millones de euros, estables en comparación con el primer semestre de 2021, a pesar de la caída del 11,9 por ciento en las ventas mundiales del Grupo en el período, en un entorno de mercado aún perturbado. El resultado neto de las operaciones que continúan es de 657 millones de euros, 458 millones de euros más que el año pasado. Y el resultado neto de las operaciones interrumpidas es de -2.300 millones de euros debido al cargo de ajuste no monetario relacionado con las cesiones de actividades industriales rusas anunciadas el 16 de mayo de 2022.
El ‘free cash-flow operacional’ del Automóvil de 956 millones de euros (incluidos 800 millones de euros de dividendos de Mobilize Financial Services) 1.470 millones de euros más que en la primera mitad de 2021. Y la deuda neta del Automóvil se reduce en 1.200 millones de euros respecto al 31 de diciembre de 2021, de los cuales 522 millones de euros vienen de la cesión de actividades en Rusia: -426 millones de euros.
Desde la firma del rombo señalan el éxito de nuevos vehículos y aceleración de una estrategia orientada al valor. Así, la cartera de pedidos del Grupo en Europa asciende a 4,1 meses de ventas, apoyada en el éxito de nuevos lanzamientos como el Renault Arkana, el Renault Megane E-Tech, el Dacia Sandero, Dacia Spring, Dacia Jogger o Alpine, que duplicó sus pedidos respecto al primer semestre de 2021 gracias al éxito de su nueva gama A110.
El Grupo confirma un impacto de la crisis de los semiconductores estimado en 300.000 vehículos en 2022, y durante el Capital Market Day que se celebrará en otoño, el Grupo presentará una actualización de sus objetivos financieros Renaulution a medio plazo y de su estrategia, posicionándolo como un actor de referencia competitivo, tecnológico y responsable.