Entre 2.000 y 2.500 metros cúbicos por hectárea tendrán los agricultores del oeste de la provincia, contando con el aporte del Trasvase de Riaño
Una campaña como la de 2017. Esas son las expectativas y casi la certeza, que tienen los regantes del sistema Carrión que comprende las comunidades de Saldaña, Villamoronta y Carrión, del Bajo Carrión, del Canal de Palencia, de La Retención, los dos de La Nava y de Macías Picabea. Porque así se lo ha manifestado la Confederación hidrográfica del Duero en la Junta de Explotación.
“Nos han dicho que tendremos hasta 2.500 metros cúbicos por hectárea, como en el sistema Pisuerga”, explica José Antonio Ibarlucea, presidente del Canal del Bajo Carrión. Pero esos 2.500 metros cúbicos tienen apreciaciones. “Eso será seguramente lo que puedan regar los regantes por debajo del trasvase del agua de Riaño”, que desemboca en el Canal de Castilla en las inmediaciones de Fuentes de Nava y que se beneficiarán de ese aporte hídrico a través del Canal Cea Carrión. “Para los que estamos aguas arriba, podremos regar, calculamos unos 2.000 metros cúbicos por hectárea, repartiéndonos el agua de los dos pantanos”.
A este respecto, a día de hoy, habría disponibles 78 hectómetros cúbicos. “Muy parecido a lo que tuvimos en el año 2017, cuando el 17 de abril había 77”. Si bien Ibarlucea señala que aún queda todo el mes de marzo “en el que se prevén precipitaciones”, que aunque no sean muy importantes “ayudan a que el campo se agarre, y es agua que no se gasta, que no se evapora ni aquí ni en los pantanos”. Lo que, de seguir las previsiones como se esperan podrían invitar a los agricultores a atrasar ligeramente el comienzo de la campaña de riego, que habitualmente se abre el 1 de abril. “Quizá se pueda aplazar un poco, puede que hasta Semana Santa”, confía Ibarlucea.
Como en 2017
En eso y en que siga cayendo agua, como ocurrió en 2017, el último año de sequía “cuando en mayo nos cayeron 55 o 60 litros por metro cuadrado y nos salvó el segundo riego a los campos”. Eso permitió alargar un poco más la campaña de riego, pero, pese a todo, se cerró el 17 de julio. “Ese día se cortó el agua”, recuerda el presidente del Bajo Carrión.
Por otro lado, Ibarlucea espera que, siguiendo los resultados cosechados hace cinco años, con el uso del Canal de Castilla a contracorriente desde el trasvase del Cea-Carrión hasta El Serrón (división del Canal de Castilla en los ramales sur (hacia la capital) y Campos (hacía La Nava y Medina de Rioseco), “ese uso se le pueda dar al Canal de Castilla desde el principio de la campaña”. Esto permitiría el riego con agua de Riaño a través de los canales de La Nava Norte ( 2.189 hectáreas) y la Nava Sur (2.723 hectáreas).
Esto permitiría aliviar la demanda de agua de esos dos canales, y dejar una parte de lo que ellos consumirían para los canales aguas arriba. Pero cabe recordar que entonces, en 2017, el aporte no fue continuo, sino que se contó solo con ciertos días de riego con agua leonesa.
Además, para poder apurar un poco más las exiguas existencias de agua en los pantanos, los regantes del Carrión solicitaron que el nivel de resguardo que quede este año al final de la campaña de riego en Camporredondo y Compuerto sea ligeramente inferior a lo habitual. De 25 a 20 hectómetros. “Pero ahí entra en juego la Comisión de Desembalse”.