Las Casas del Parque de Castilla y León han programado diferentes actividades para conmemorar una nueva edición del Día Internacional de las Aves, que este año se celebra con un eslogan que busca concienciar y sensibilizar a la población sobre la necesidad de protegerlas y conservarlas a lo largo de sus rutas migratorias, mediante la reconexión con la Naturaleza: ‘¡Canta, vuela y elévate como las aves!’.
En el año 2020 se contabilizaron en la Comunidad más de 167.900 ejemplares de aves acuáticas migratorias pertenecientes a 81 especies en 18 humedales de la región y para concienciar sobre la importancia de su conservación, las casas del parque de Arribes del Duero, han programado diferentes actividades.
Así ‘El Torreón de Sobradillo’, ubicada en esta localidad salmantina, organiza el domingo un recorrido guiado hasta el Mirador de La Code donde se podrá observar y disfrutar de las aves más emblemáticas del Espacio Natural. Se saldrá del centro a las 10h.
En Fermoselle, en la vertiente zamorana de Arribes, la conmemoración se traslada al día 11, momento en el cual la Casa del Parque realizará, a las 11h una actividad de educación ambiental relacionada con la migración de una de las especies más emblemática y denominada “El Viaje del Alimoche”.
La Casa del Parque de la Reserva Natural Riberas de Castronuño tiene programadas varias actividades a lo largo de este próximo mes de octubre. En las mañanas del 17 y 23 de octubre desde las 10h está previsto el desarrollo de un anillamiento científico de aves con el que mostrar el fascinante mundo de los pájaros; y el domingo día 24 de octubre, tendrá lugar, desde las 10h, una ruta ornitológica por la Senda de los Almendros para conocer de primera mano las especies acuáticas más comunes de la zona.
CONOCER PARA CONSERVAR
Las aves acuáticas migratorias forman parte del rico patrimonio natural de Castilla y León. Este grupo faunístico hace uso de la red de humedales presentes en la región, donde se alimentan y descansan, antes de continuar el largo viaje a través de sus rutas migratorias entre Europa y África. Muchas de estas zonas húmedas, en concreto 297, están incluidas en el Catálogo de Zonas Húmedas de Interés Especial, aprobado en 1994, ampliado en 2001, otorgando a estos humedales un reconocimiento y régimen de protección que permita su conservación.
Dentro del marco de la planificación de la Red Natura 2000, el Plan de Monitorización del Estado de Conservación de la Biodiversidad en Castilla y León aborda principalmente la propuesta del seguimiento y evaluación de los hábitats de interés en la Comunidad Europea. En total el número de especies objeto de seguimiento se sitúa en 323 taxones de fauna en la Comunidad, lo que da idea de la magnitud del programa regional de seguimiento de fauna y flora protegida.
UN PROGRAMA ESPECÍFICO PARA LAS AVES MIGRATORIAS
En el marco de este plan está incluido un programa dedicado a las aves acuáticas migratorias presentes en la comunidad, mediante la realización de un seguimiento mensual en los humedales más significativos de Castilla y León, que los realiza la Consejería de Fomento y Medio Ambiente y en el que participan agentes medioambientales, celadores de Medio Ambiente y técnicos de los Servicios Territoriales de Medio Ambiente, junto con el apoyo de personal técnico de la Fundación del Patrimonio Natural.
Las aves acuáticas son consideradas bioindicadores, siendo estos estudios una herramienta clave para conocer la evolución del estado de conservación de las zonas que habitan. Con este tipo de seguimiento continuado y preciso, se pueden detectar amenazas sobre los humedales y aves que los utilizan. Estos estudios suponen una herramienta imprescindible para la gestión de los espacios.
MÁS 167.000 AVES ACUÁTICAS CONTABILIZADAS
En los seguimientos realizados durante el año 2020, se contabilizaron un total de 167.985 ejemplares de aves acuáticas pertenecientes a 80 especies, detectándose especies migratorias amenazadas como el avetoro común, especies raras y accidentales como el falaropo picofino o especies más comunes y numerosas como los correlimos comunes o los chorlitejos grandes.
Los humedales más importantes por número de ejemplares detectados han sido las Lagunas de Villafáfila en Zamora con 69.677 ejemplares de 62 especies, los humedales de La Nava (26.671 ejemplares de 55 especies) y Boada de Campos (18.993 de 48 especies) en Palencia, la laguna de El Hoyo (El Oso) en Ávila con 11.482 ejemplares de 41 especies, el azud de Riolobos en Salamanca con 10.876 ejemplares de 25 especies y el embalse de San José (Castronuño) en Valladolid con 9.722 ejemplares de 26 especies.
Las cinco especies más abundantes fueron el ánade azulón (61.840 ejemplares), la avefría europea (24.391 ejemplares), la cerceta común (13.469 ejemplares), el ánsar común (11.230 ejemplares) y el cuchara europeo (8.888 ejemplares) que representan alrededor del 72 por ciento del total de los ejemplares censados durante el año 2020.
Por otra parte, se detectaron especies poco habituales como el charrán común o la canastera, así como especies raras o accidentales como el falaropo picofino, con observaciones puntuales de ejemplares aislados.
