‘El hombre bueno’, un dibujo original del escultor palentino Victorio Macho, que se hallaba en paradero desconocido desde alrededor de 1996, ha sido recuperado por la Real Fundación de Toledo y ya se encuentra en la sede del museo del artista, en Roca Tarpeya.
Así lo ha anunciado el director general de la Real Fundación, Eduardo Sánchez Butragueño, este martes en una rueda de prensa en la que ha explicado que esta obra “forma parte del legado del escultor” y “por razones desconocidas pasó a manos de un particular”.
En los últimos meses, la Real Fundación de Toledo localizó el dibujo de ‘El hombre bueno’ dentro de los rastreos que realiza constantemente. Pertenece a la serie ‘La Raza’, una colección de retratos realizados por Victorio Macho en su juventud, que refleja los rasgos físicos y psicológicos del “espíritu castellano”.
Su propietario era Francisco Escudero, de la empresa familiar Anticuarios, quien realizó la donación de dicha obra “de forma desinteresada”, en el mismo momento en que se le informó de que el dibujo debería estar en el Museo Victorio Macho ya que, según exponía el escultor en su testamento, donaba “al pueblo español la mayor parte de su obra” y señalaba que era en Roca Tarpeya “el lugar en el que dicho legado debía ser conservado y expuesto”.
La Fundación ha aprovechado para agradecer públicamente “la generosidad y las facilidades” que Francisco Escudero les ha dado a la hora de recuperar la pieza, ya que, gracias a esto, los visitantes podrán valorar más la figura del artista, no solo por su faceta de escultor, sino por su faceta como “excepcional dibujante”.
A preguntas de los medios, Sánchez Butragueño ha explicado que actualmente, para completar la serie ‘La raza’, faltan dos obras de Victorio Macho. Una es ‘El hombre de madera’, “del que solamente hay una copia” y otra ‘El sembrador’, que actualmente está “en paradero desconocido”.
En cuanto a la esperanza de recuperar más dibujos, ha adelantado que la obra ‘Aldonza Lorenzo’, la única mujer de la serie, fue comprada mediante subasta y están tratando de “alcanzar un acuerdo” para que les “faciliten el nombre del comprador”, ya que “la ley de protección de datos lo impide”.
Al respecto, ha añadido que esperan “no tener que llegar a tomar medidas judiciales” para que sea “un juez el que obligue a esa casa de subastas a facilitar el nombre del comprador”. Esto lo harían, según ha detallado, en base a una denuncia a la que “se adjuntaría el testamento y el inventario de Victorio Macho”.
La Real Fundación ha declarado que seguirá vigilante para poder recuperar el resto de obras del artista que formaban parte de su testamento e inventario, con el objetivo de culminar la restitución total de su legado.
CREACIÓN FUNDACIÓN VICTORIO MACHO
La Fundación Victorio Macho se creó para gestionar los fondos del artista y el museo creado en Roca Tarpeya hasta 1987, año en el que el museo cerró por problemas económicos. Nueve años después, la Real Fundación de Toledo se hizo cargo de este legado fusionándose con la Fundación.
Sánchez Butragueño ha explicado que al comparar los bienes existentes en la casa, con el inventario y el testamento de Victorio Macho, descubrieron que “había una serie de obras que faltaban” y comenzaron su recuperación.
Así, en 1996 y posteriormente, la Real Fundación de Toledo logró recuperar, de anticuarios y casas de subastas, varias obras que habían salido de manera ilegal de Roca Tarpeya. Entre estas piezas destacan ‘El pastor’, ‘El hermano del obispo’ o ‘El Campanero’, entre otras.