El colegio María Teresa Íñigo de Toro de Valladolid envía botas de agua con mensajes de sus alumnos a los niños de Valencia
Una madre del centro que colabora con un grupo de voluntarios que se desplazaron a Valencia, junto a una empresa de placas solares, que detectaron esta necesidad, lanzó la propuesta, con el objetivo de que los niños se puedan mover con seguridad, porque el estado de limpieza de las calles es cuestionable. Lo explica a Ical la jefa de Estudios del colegio, Marta Velicias, que precisa que estos voluntarios vieron que los niños “no tienen calzado adecuado” para moverse en el fango.
El alumnado percibe de una manera más cercana la catástrofe, viendo que pueden colaborar con otros compañeros de su edad. Además, los mensajes de ánimo y de cercanía son una manera de contarles que están con ellos. “Es una ayuda directa”, remarca, para precisar que el número de la bota se limitado al número 37 e inferiores, para que sean para los niños.
La empatía y la implicación no cesa, ya que el centro educativo también suma otra iniciativa, de la mano del alumnado de sexto de Primaria. Este año los fondos recaudados, unos 500 euros, en su Túnel del Terror, actividad enmarcada en Halloween, los enviarán a un colegio de Valencia, en lugar de dedicarlos a su fiesta de fin de curso. “Debido a los acontecimientos, el grupito de los niños y niñas ha tomado la decisión de destinarlo a un colegio de Valencia, comenta.
“Ya hemos contactado y estamos a la espera de que nos digan una necesidad concreta, porque no queremos enviar dinero, sino adquirir lo que crean conveniente, ya sean juegos, libros o material”. Se comprará todo aquí para que el alumnado lo vea antes de mandarlo. “No queremos intermediarios”, concluye la jefa de estudios.
Túnel del terror