Luis Miguel Cárcel es natural de la localidad valenciana de Requena y señala que en estos momentos es imposible la comunicación con sus familiares porque no hay cobertura móvil ni fija
“Empezó a llover y enseguida empezaron a llegar imágenes de Requena y de Utiel, que está muy cerca. El río Magro pasa por el medio de los dos y fue donde empezó a llover de manera torrencial. Se desbordó el río y afectó más a Utiel, que está más cerca de ese río y aunque todas las casas están con agua, afectó sobre todo a las zonas bajas”, explica Luis Miguel Cárcel.
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La comunicación con sus familiares más cercanos se ha ido complicando a medida que han ido pasando las horas. “Al principio parecía una gota fría normal, pero luego cuando se vieron las imágenes fue cuando intenté contactar en el momento en el que hemos podido. La comunicación ahora es imposible en Requena porque no hay cobertura móvil ni fija”, señala este valenciano afincado en Palencia, que a primera hora de la mañana ponía rumbo a Requena. “Me voy hoy a ver a mi familia y a ver cómo está una casa que tengo allí. Estoy seguro que tiene barro dentro, pero espero que no sea mucho”. Una situación que ha golpeado a familiares y amigos. “Siempre afecta a vecinos y conocidos. Ha afectado a infraestructuras que conocíamos cuando éramos pequeños. La zona de Paiporta es un desastre. Todavía no se puede acceder a Valencia desde Requena. Sé que puedo llegar sin problema hasta allí por la A-3, pero luego ya no se puede ir”, explica.
La memoria de Luis Miguel Cárcel todavía recuerda un episodio parecido hace ya más de cuarenta años. “Recuerdo la ‘pantanada’ de la presa de Tous en el año 1982, más o menos por esta época. Estuvimos muchos días sin poder entrar a las viñas del agua que cayó. Fue una tragedia que destrozó todo lo que encontró a su paso”, concluye.
