Artículo de opinión de Javier Moreno Lázaro, Catedrático de Historia e Instituciones Económicas por la Universidad de Valladolid
Aguilar de Campoo languidece. No es, desde hace algún tiempo, la localidad que deslumbraba por la exquisitez de su oferta cultural, el cuidado de su patrimonio monumental, el sosiego que trasmitía su entorno natural. Pareciese que un meteorito haya caído en la plaza, desprendiendo con su impacto un pestilente olor a caspa, desidia y extravagancia que ha anulado al de la galleta.
La política urbanística de la corporación constituye la amenaza más inminente, tangible y peligrosa para la villa. Pretende, nada menos, que engullir al monasterio de Santa María la Real en un bosque de adosados, quebrando ese maravilloso equilibrio entre el edificio y su entorno paisajístico. A este despropósito hay que añadir la indisimulada voluntad de dejar caer- cuando no permitir la demolición- de inmuebles de gran valor arquitectónico en la casco histórico de la villa.
Más exótico, por lo atrabiliario, es el proyecto de reconstrucción del castillo para ser convertido en un centro de interpretación (uno más) de gestas del medievo (tiempo de españoles de bien) La cuestión es que el castillo ya fue restaurado en su día por Eugenio Fontaneda. De realizarse esta grotesca Intervención, perdería el encanto de la ruina del que supo dotarle Fontaneda y peligraría seriamente el yacimiento arqueológico que allí se halla.
Por último, la corporación aguilarense no podía ser ajena a esta fiebre compulsiva por la apertura de campos de tiro que sacude a toda la provincia, como antaño la de frontones .La “infraestructura” (sic) en cuestión- completamente inútil – pretende habilitarla en Grijera, junto al camino olvidado, una cañada real, un segundo yacimiento arqueológico y- lo que es peor- junto a viviendas habitadas. Un dislate.
Son estas las muestras más recientes y obscenas de la insensibilidad hacia el patrimonio artístico, el medio ambiente y, por ende, a la calidad de vida de los aguilarenses. El problema es que se añaden a todo un rosario de agresiones al bien común entre los que despuntan las granjas porcinas y los aerogeneradores tan del gusto de los responsables públicos locales.
Y eso por no hablar de la vulgarización de su propia historia auspiciada por la propia corporación. Basta con leer los indicadores monumentales de la localidad, donde menudean los errores de bulto (eso sí, muy divertidos) y la mala redacción, para percatarse de ello.
Ojalá la alcaldesa recupere la forma de hacer bien las cosas. De no ser así, Aguilar corre el riesgo cierto de perder la condición de pueblo más bonito de España que le atribuyó atinadamente en 1929 Victorio Macho y que para muchos- entre ellos, quien esto firma, aún conserva.
Se te olvida decir la nula colaboración entre el equipo de gobierno con las pedanías, a las que no quieren oír y solo le interesan para el pago de tasas e impuestos, y que pretende llenar de placas solares con la colaboración de algunos propietarios particulares de terrenos que no viven de la agricultura y solo piensan en la especulación
Estimado Sr.:
1- Los monasterios crearon ciudades, a su alrededor se construían viviendas y talleres.
2- El mantenimiento de los edificios históricos es carísimo, la rehabilitación es un piélago de trámites y, el resultado, suele ser el abandono por imposibilidad de mantenerlo o rehabilitarlo.
3- Los que arriesgan su patrimonio, y su futuro, montan las empresas que creen viables. Si no te gusta siempre puedes impulsar otras industrias.
Un saludo
Como se nota que a Aguilar de Campoo solo vienes de visita… y te faltan datos: Los adosados que engulleron al Monasterio se construyeron con la corporación del PSOE, es muy facil hablar sin residir aqui , mas te vale informarte mejor y no dejarte manipular por opiniones sesgadas que es lo que parece tu articulo
Estás equivocada Elena, las nuevas edificaciones se van a hacer según llegas de la carretera de Cervera a mano derecha antes de llegar al monasterio. El artículo está en lo correcto, igual que todo lo demás que dice.
Cuantas sandeces.
Joder macho, te quejas de como escriben los demás, pero en Facebook escribes fatal, comiéndose letras y con algunas faltas de ortografía. Eres catedrático, deberías ser un ejemplo para los demás.