El hombre, de 49 años, confesó ante los agentes de la Policía Local de la ciudad gallega que había “hecho algo malo”
ICAL
El presunto autor este lunes de su pareja sentimental en una vivienda del barrio de Pajarillos de Valladolid dejó el coche mal aparcado en la avenida Beiramar de Vigo, lo que provocó la alerta de la Policía Portuaria, que avisó a la Policía Local de la ciudad gallega. En la plaza de O Berbés, comprobaron que sobre el vehículo, que estaba vacío, recaía una orden de inmovilización: era el turismo propiedad de la víctima del crimen.
Según publica en su edición digital Faro de Vigo, una vez comprobados estos extremos, los agentes comenzaron la búsqueda del hombre, J. C.S.J.M., al que pudieron caracterizar gracias a las cámaras del puerto. Se trataba de un varón de complexión gruesa, camiseta morada, pantalón corto y gorra de beisbol.
El visionado de las imágenes, en el que colaboró la Policía Portuaria, permitió reconstruir los pasos del sospechoso, que habría parado en un bar de la avenida, ya en la zona de los astilleros. Finalmente, dieron con él en la calle Eduardo Cabello, en las inmediaciones de la iglesia de Bouzas.
El hombre no se esforzó en ocultarse a pesar de que era buscado por las fuerzas de seguridad desde que ella apareciese muerta con signos de violencia en su vivienda de Valladolid.
El rotativo señala que en el momento de su detención reconoció a los agentes que “se encontraba muy mal” y que había “hecho algo malo”, mientras rompía a llorar, siempre según el relato policial. El presunto autor del crimen se encontraba “nervioso, tembloroso”, y en sus brazos presentaba arañazos compatibles con una pelea.
En el registro del vehículo, en el interior de una mochila, se halló la cartera de la víctima. Finalmente, confesó espontáneamente que mató a su mujer clavándole un cuchillo.
Los agentes procedieron a su detención, ante la que no opuso resistencia. El Peugeot 307 fue trasladado al depósito municipal a la espera de que lo trasladen a Valladolid para su entrega al grupo de la Policía Nacional que investiga el crimen. No consta el motivo por el que estaba en Vigo y, en principio, no se ha detectado ningún vínculo con la ciudad. El hombre ya ha sido conducido a Valladolid, donde hoy presta declaración ante la Policía Nacional.
