La entrenadora palentina de gimnasia rítmica ha hecho soñar a todo un país en estos Juegos Olímpicos: “Se me ponía hasta la carne de gallina”
Los Juegos Olímpicos de París 2024 ya finalizaron. Ahora, llega el momento del breve descanso tanto para los atletas como para los entrenadores antes de comenzar nuevos retos, y desconectar de todo el esfuerzo y la dedicación acumulados durante los últimos cuatro años. Un ejemplo de este gran trabajo, que ha dado sus frutos, ha venido de la mano de la palentina Sara Bayón, que fue a la cita como entrenadora del conjunto francés de gimnasia rítmica, con todo un país detrás expectante… y, al final, les ha llevado a soñar por todo lo alto.
La gimnasia rítmica francesa se ha ganado un nuevo estatus a partir de estos Juegos Olímpicos. A pesar de que el equipo anfitrión no logró subir al podio, su desempeño en la competición ha sido digno de admiración: “Nuestro objetivo al llegar a Francia era claro: elevar el nivel del equipo que no tenía representación en los Juegos desde el año 2000. Queríamos asegurarnos de que el equipo pudiera acceder a la final, y lo logramos con un desempeño sobresaliente”, comenta Bayón. Y así resultó. Su equipo se clasificó a la final quedando en cuarta posición, a un pequeño paso del podio. Todo ello orquestado en apenas tres años y ocho meses, tras 24 años sin representación…
“Las chicas estuvieron espectaculares… Han brillado en el momento justo en el que tenían que brillar”
Ya en la final… El sueño empezó a crecer. El podio se quedó a tan solo ‘un paso’… Y es que, aunque el equipo comenzó la final con una sólida posición, un pequeño contratiempo en el segundo ejercicio impidió alcanzar la medalla. “En la final, tuvimos un pequeño error en la ejecución, de una niña que se enrolló un poquito con la cinta y entonces no pudo realizarla, y eso nos costó más de dos puntos. Si no hubiera sido por eso, podríamos haber terminado en el podio”, explica Bayón.
A pesar de ello, la palentina no quiere quitarle nada de mérito a todo lo conseguido por sus chicas, manifestando lo memorable que estuvieron tanto ellas como su afición, totalmente entregada: “Las chicas estuvieron espectaculares… Han brillado en el momento justo en el que tenían que brillar”, recuerda Bayón. De igual manera fue la reacción de la Federación Francesa, que se deshizo en elogios a la actuación del conjunto francés y al trabajo de Sara y su compañera, Anna: “Nos dijeron que les habíamos hecho soñar. Es increíble pensar que hace solo tres años, estábamos empezando desde cero”, añade Bayón.
Reflexionando sobre lo aprendido, Bayón resalta el orgullo de ver a su equipo soportar la presión. “Me siento extremadamente orgullosa del trabajo realizado en estos tres años y ocho meses. La manera en que el equipo ha respondido a la presión y ha demostrado su capacidad ha sido excepcional”, comenta Bayón, mostrándose totalmente satisfecha con los resultados.
“El público cantando la Marsellesa… pues es que yo no soy francesa, pero se me ponía hasta la carne de gallina”
La experiencia personal de Bayón en estos Juegos Olímpicos ha sido profundamente emotiva. “He vivido estos Juegos de manera especial, completamente diferente a mis experiencias anteriores”, destaca Bayón. Contrario a los Juegos Olímpicos de Río 2016, donde la presión fue intensa y el nerviosismo predominó, en París Sara comenta que sintió una satisfacción constante desde el primer momento. “El público volcado con el equipo ha sido de pelos de punta. El público cantando a capella la Marsellesa… pues es que yo no soy francesa, pero se me ponía hasta la carne de gallina”, comenta Sara.
Bayón se encontraba en estos Juegos mirando desde la otra orilla al conjunto español, quienes no pudieron clasificarse a la final: “El equipo español tuvo un ciclo muy bueno, con numerosos logros en competiciones anteriores. Es una pena que no hayan podido brillar en estos Juegos… pero el deporte es así, y la presión puede afectar a los atletas”, opina Bayón.
La Federación Francesa ha mostrado interés en seguir trabajando con Sara
Más cercana a ‘su tierra’, los vínculos de Sara Bayón con Palencia siguen siendo fuertes, a pesar de su carrera internacional. “He recibido un apoyo increíble. He tenido a mis amigas de Palencia, de toda la vida en las gimnasia, con las que he compartido tapiz, que han estado ahí apoyándome y no puedo estar más feliz, porque han ido con pancartas de Palencia, con camisetas apoyándome con mi foto inclusive… Palencia estaba presente en el pabellón de París“, menciona Bayón, quien aprecia profundamente el respaldo continuo de su comunidad.
Con el cierre de los Juegos Olímpicos, Bayón ahora se toma un tiempo para descansar y reflexionar sobre el futuro. “Ahora es momento de descansar y asimilar todo lo que hemos vivido”. Eso sí, tras este espectacular desempeño del equipo, la Federación Francesa ha mostrado interés en seguir trabajando con Sara… pero por ahora, como bien dice, toca “tomarse un tiempo, recargar energías, y pensar en lo que viene”.
