Marqués de la Ensenada Barco del Canal de Castilla
Marqués de la Ensenada

Columna de opinión de la periodista y guía turística Naide Nóbrega

Ahora sí, ¡ya tocamos el verano con las dos manos! Y no tenemos absolutamente ninguna excusa para reclamar de falta de programación a lo largo y ancho de Palencia.

Es impresionante lo que se ofrece por la ciudad y la provincia especialmente este año. Julio y agosto están a tope. Conciertos, circo, danza, teatro, gastronomía y turismo, turismo, turismo. Disfruta magníficos sitios cerrados (protegidos para los días de más calor) o respira la naturaleza, sea aprovechando rutas o dándote un chapuzón en nuestros pantanos o en tu piscina preferida. Piedras, agua o céspedes. Valles, páramos y montañas. Los pueblos están a rebosar y las posibilidades son infinitas.

Para lo que es programación estival de ocio y cultura efectivamente, además de leer con mucha atención todo lo que te traemos en esta revista PaCO, sugiero que te acerques a la Oficina de Turismo de Palencia para no perderte nada.

Te facilitaremos de todo un poco: desde las actividades turístico-culturales propuestas por el Ayuntamiento de la capital y por la Diputación, pasando por los horarios de iglesias y monumentos especialmente abiertos para la temporada – como nuestras joyas del Románico Norte o de pueblos del Camino de Santiago – hasta las programaciones de fiestas y actividades locales por las cuatro comarcas.

Lo que no nos falta son cosas que contarte y paseos que sugerirte. Acércate y verás.

Disfruta de ese frescor que encuentras por la noche en la Montaña Palentina, aventúrate por nuestro Geoparque, engánchate en una visita teatralizada en la capital, navega por Tierra de Campos en el Canal de Castilla, tómate unos claretes refrescantes en nuestras bodegas tradicionales o pasa horas de lo más agradables en La Olmeda.

Invéntate nuevos verbos: bodeguear, canalear, musear, cerratear, palentinear

Desafía tu propio palentinismo: echa cuentas a ver lo que todavía no conoces en hasta 50 o 100 kilómetros alrededor de tu casa. Es verano y tu cuerpo lo sabe: baila, canta, permítete gozar de una temporada donde esta “felicidad solar” puede estar al mando. Aprovecha. Regala a tus ojos algo que ellos nunca hayan visto. Haz algo por primera vez en la vida. Atrévete. El verano es la temporada donde la sensación de que todo es posible está allí, latente. Abrázala.

Ya sabes: mucha agua, poca ropa, hidratación abundante y ganas de ser feliz. Vivamos juntos este verano compartiendo momentos cálidos con las personas que más amamos.

¿Qué te ha parecido esta columna? Escríbeme. Mi e-mail: naidenobrega @ hotmail.com

-Publicidad-

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingresa tu comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí