El reto es ofrecer una visión integral de cómo el cambio climático está afectando a este recorrido y cómo los conocimientos vernáculos locales pueden ayudar a abordarlo
Un estudio realizado por la Fundación Santa María la Real ha permitido definir y catalogar hasta 24 tipos de paisaje diferentes en el Camino de Santiago Francés que comprende además, 69 unidades paisajísticas a lo largo de cinco regiones y 173 municipios. Es una de las principales conclusiones de la investigación realizada en el marco del proyecto ‘Guía de adaptación al cambio climático para el Camino de Santiago Francés’ que cuenta con el apoyo de Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a través de la convocatoria de subvenciones para la realización de proyectos que contribuyan a implementar el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático 2021-2030.
El reto del proyecto que comenzó hace unos meses es ofrecer una visión integral de cómo el cambio climático está afectando a este icónico recorrido y cómo los conocimientos vernáculos locales pueden ayudar a abordar estos desafíos.
El Camino de Santiago Francés es una de las rutas de peregrinación más importantes del mundo, con una media de 350.000 peregrinos al año. Cifras que demuestran que se ha convertido en un punto de referencia para amantes de la naturaleza, viajeros y peregrinos de todo el mundo. Sin embargo, las amenazas del cambio climático, como el aumento de las temperaturas, el riesgo creciente de incendios forestales o las lluvias torrenciales, están afectando a este itinerario.
Con este proyecto, la Fundación Santa María la Real busca, no solo concienciar sobre estos desafíos, sino también identificar soluciones prácticas basadas en los conocimientos tradicionales de cada región. La investigación permitirá identificar prácticas locales que han ayudado a las comunidades a adaptarse durante siglos a unas condiciones climáticas cambiantes.
La publicación, que se editará tanto en formato impreso como digital, estará diseñada no solo para llegar a los municipios del Camino, sino también a albergues, peregrinos, oficinas de información turística y todos los amantes de esta experiencia. El objetivo final es que se transforme en una herramienta valiosa para promover la conciencia sobre el cambio climático y para inspirar la acción en la preservación de esta joya cultural y natural. El proyecto se extenderá hasta 2025 y, por ahora, ya se ha llevado a cabo una revisión bibliográfica y una investigación que ha permitido identificar 24 tipos de paisajes en el Camino, con 69 unidades paisajísticas distintas, desde bosques, a ríos, valles o montañas.
El trabajo continuará con la elaboración de mapas que identifiquen cada uno de esos paisajes, las unidades paisajísticas que comprenden y otros datos como usos del suelo, hábitats de interés o espacios pertenecientes a la Red Natura. Además, se realizará un análisis de Debilidades y Fortalezas (DAFO) y una caracterización de cada paisaje, así como su evolución climática y cartográfica.
El desarrollo de la investigación y la guía son posibles gracias al apoyo de Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a través de la Convocatoria de Subvenciones para la realización de proyectos que contribuyan a implementar el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático (2021-2030). Además, se cuenta con la colaboración de la Asociación de Municipios del Camino de Santiago Francés que, actualmente, comprende 113 localidades.