Bar La Montaña ha sabido reinventarse como un espacio de encuentro y diversión, donde destacan los juegos recreativos, como los dardos y el billar, el ambiente acogedor y las buenas tapas
Ubicado en la calle Cruz y Castillo, 4, el Bar La Montaña se ha reinventado bajo la nueva gerencia de Óscar y Gema.
Desde su reapertura el pasado mes de julio, este establecimiento se ha propuesto marcar la diferencia, alejándose del típico concepto de bar para convertirse en un espacio dedicado al ocio y la diversión. Su enfoque en los juegos recreativos, como los dardos y el billar, ha sido el sello distintivo que lo ha destacado.
Según Óscar la apuesta por los juegos recreativos ha sido clave para atraer a una clientela que busca algo más para pasar tardes entretenidas. Es por eso que el primer sábado de cada mes, a partir de las 16:30 horas, se organizan campeonatos y partidas de dardos y billar, convirtiendo al Bar La Montaña en el punto de encuentro para los amantes de estos juegos.
Pero la oferta de este establecimiento va más allá de los juegos. La Montaña deleita a sus clientes con una amplia variedad de tapas, cortesía de la casa con cada consumición. Un gesto que los clientes agradecen pues cada vez más vecinos del barrio eligen este lugar para disfrutar de un buen vermú acompañado de deliciosas tapas.
Además, para aquellos que deseen disfrutar de una comida más completa, el Bar La Montaña ofrece un servicio de comida por encargo, permitiendo a los clientes elegir los platos que deseen disfrutar en compañía de familiares y amigos.
