La Gerencia de Salud de Palencia prorroga 12 meses más el contrato que mantenía con una clínica madrileña para las Interrupciones Voluntarias de Embarazo de las palentinas
Las palentinas tendrán que seguir desplazándose a Madrid para interrumpir voluntariamente su embarazo dentro del Sistema Público de Salud. Lo tendrán que seguir haciendo al menos otro año, dado que la Gerencia de Asistencia Sanitaria de Palencia ha hecho uso de la posibilidad de prorrogar un año más el contrato que tenía desde el pasado marzo de 2023 con la Clínica Isadora, en Madrid, y obviamente fuera de Castilla y León.
Y lo hace a pesar de que hace unos meses el Tribunal Constitucional ya se pronunció en un caso similar al considerar que tener que desplazarse a abortar a una comunidad distinta de la de residencia “vulnera los derechos fundamentales de la mujer”.
Hace un año, la Gerencia de Asistencia Sanitaria de Palencia justificó la derivación a centros privados por la “imposibilidad de asumir dichos procedimientos actualmente” para cubrir “mediante concierto de procedimientos de interrupción voluntaria del embarazo con una entidad privada que venga realizando esta prestación para cubrir estos procedimientos en las pacientes beneficiarias de la Seguridad Social de esta Gerencia”, explicaba la memoria de aquel contrato que se estipulaba para el pasado año y los tres primeros meses de este 2024.
De esta forma la Gerencia de Asistencia Sanitaria de Palencia del Sacyl pagará entre 230 y 1.500 euros por cada uno de los abortos que se realicen en instalaciones privadas a mujeres beneficiarias de la Seguridad Social y que residan en Palencia. Esa es la horquilla que maneja el contrato con un montante de 42.730 euros anuales. El mismo contemplaba la posibilidad de ejercer hasta dos prórrogas anuales, de las cuales una se acaba de hacer efectiva.
Lo cierto que el Sacyl no fijó en Madrid primeramente sus posibilidades, pero es que la Clínica madrileña fue la única que se presentó a ese concurso para este contrato que se prorroga ahora.
Un contrato por el cual, la propia clínica se encarga del pago del viaje (o parte del mismo) a las pacientes: “Abono de los gastos de transporte (ida y vuelta) de la gestante (0,10 €/km desde la localidad de residencia de la paciente hasta la localidad del centro adjudicatario, según mapa oficial de carreteras MOPU)”. Esto, en el caso de que residiera en Palencia capital serían unos 25 euros de ida y otro tanto de vuelta. Lo que cuesta un billete en un Media Distancia, y ligeramente por encima de lo que cuesta un billete en un autobús de Alsa. En Aguilar, unos 35 euros y en Guardo unos 34. Al acompañante solo se le pagará esa cantidad si la gestante es menor de edad.